La semana pasada a Tulito le dió por destrozarse el ojo y de paso la cara. Ayer volvió a las andadas y Doña Tuli lo castigó poniéndole la campana casera que le fabricó hace siete días. Ni lo volvió a intentar, hoy mucho menos no vayan a colocarle el 'trasto' ese de nuevo. ¿Verdad, Tulito?...
Pepe también anda haciendo el indio y esta mañana se ha pegado un arañazo en toda la oreja, como es un bruto... Luego, cuando esté medio dormido, le pasaré un trocito de aloe vera por el rasguño y ya está. ¡Hasta el próximo!
Tulito, cuando te vea te voy a dar fuerte en el culo, por borrico. A Pepe, nada más que vuelva a rascarse, le pego un buen collejón o le tiro un cojín a la cabeza. ¡Avisados estáis!
1 comentario:
La verdad es que se lo he puesto diez minutos. Me daba pena.
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