¡MIRAD LO QUE AGUANTO!

Aunque, cuando lo vea, me estire del rabo lo voy a contar:

Viernes por la mañana, "mi cuidadora y dadora de mimos y potitos" se arregla lo que puede y sale de casa, me dice las tonterías de costumbre "voy a comprate comidita, enseguida vuelvo, etc...". Minutos más tarde, vuelve a abrir la puerta y entra como una loca al lavabo con bolso, bolsa de basura y chaqueta. No entiendo.
Al poquito sale, vuelve a cerrar la puerta, me suelta las mismas memeces y al segundo y medio regresa de nuevo, vuelve al cuarto de baño y coge el bolso que había olvidado.

Me tenía de un mareado con tanta entrada y salida de casa que ya temía otro apresurado regreso. No fue así, pero lo más gordo de todo es cuando me entero de que había olvidado la basura en el el cuarto de baño, pero como ya tenía agujetas de tanto subir y bajar, optó para dejarla para el día siguiente. ¿Creéis que se puede vivir y funcionar así?...

Después de tanto baile matinal, por la tarde solo me faltó enterarme de que, esa misma mañana, cuando se puso las botas se equivocó de pié y no entendía porque le hacían daño... Cuando vió que caminaba como un pato mareado, lo comprendió y se las cambió. ¿Se puede ser más tontuela o despistada?... La amiga a la que le contaba la "gracia" debío pensar que está loca de atar.

¿Esto es normal?... Como diría Don Gato, "la tontita" cada día está más pallá que pacá. Yo ya hace tiempo que me he percatado y empiezo a preocuparme.

PEPE