El gato de Bengala, "Serval" ó "Bengal" me tiene el corazón robado. Su aspecto salvaje, su pelaje con grandes manchas y su vientre de color claro que recuerda al Leopardo asiático y al Guepardo africano.
Esta raza, aunque su aspecto sea salvaje, tiene el carácter de un apacible gato doméstico siempre y cuando sean de más de 4 generaciones posteriores al cruce original entre un felino doméstico y un Leopardo Asiático. (En la foto podéis ver los cruces utilizados para crear al "Bengal").
Los gatos domésticos de Bengala son muy inteligentes y cariñosos, como todos los gatos; pese a su sorprendente y hermosa apariencia salvaje, en realidad son seres muy dóciles y confiados.
Pueden llegar a ser muy traviesos y activos, como todos los gatos, y siempre están listos para jugar ya que les encanta estar rodeados de compañía, por ello son aptos para estar con niños y otros animales.
Debido a su pelaje especial reduce en gran cantidad el número de alergias en personas con este tipo de problema.
Además el "Bengal" es el único gato que ama y disfruta jugando en el agua. Tienen una personalidad “perruna”, les encanta pasear por la calle, lógicamente con correa, y cuando regresemos a casa siempre nos recibirá con alegría y con el comportamiento entusiasta y lleno de vitalidad típico de los perros.'
Dicen que este gato exótico y único en el trato con las personas ocupará un hueco enorme en nuestra vida como ningún gato lo haya hecho hasta el momento.
¡Yo quiero uno! (Cuando me toque la primitiva, se lo compro a Pepe.)
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