No me negaréis que este sofá está pensado por alguien muy gatuno: Seungji Mun, lógicamente japonés. Este invento es perfecto para que mientras tú lo utilizas como "chaisse longue" e intentas relajarte un rato, tu encantador minino se dedique a entrar, salir y trepar por dentro del tubo. Tú descansarás poco, pero él se lo pasará pipa. Además tiene otra gran ventaja: nadie nos lo envidiará o robará.
¿Y esta alfombra "ratón" plegable, para que jueguen y se estiren a gusto, no os parece una idea perfecta?...
A mi si, sobre todo porque se puede plegar y cabe detrás de una puerta, lugar de destino tras los primeros diez minutos de novedad.
A veces pienso en el dineral que he gastado en trastos parecidos para mis gatos, juguetes que les han hecho mucha, ¡muchísima ilusión!...
A 'Gato Papá' la ilusión le duraba dos días, a Pepe diez minutos tirando largo; pero este sofá le gustaría y enloquecería hasta a Pepe; lo malo es que no tengo sitio, ni se donde conseguirlo y económicamente no estoy para chorradas. Además es feo de narices y cantaría la Traviata en cualquier salón; salvo que se tenga una habitación destinada a nuestros caprichosos peludos -hay casos- pero, por desgracia, no es el mío.
A 'Gato Papá' la ilusión le duraba dos días, a Pepe diez minutos tirando largo; pero este sofá le gustaría y enloquecería hasta a Pepe; lo malo es que no tengo sitio, ni se donde conseguirlo y económicamente no estoy para chorradas. Además es feo de narices y cantaría la Traviata en cualquier salón; salvo que se tenga una habitación destinada a nuestros caprichosos peludos -hay casos- pero, por desgracia, no es el mío.
1 comentario:
Si entran a robar se llevan hasta la espumadera de la cocina, pero el sofá... ¡por mi madre que lo dejan!
Publicar un comentario