Cada vez que aparece "Bebé", el Golden Retriver más buenazo del mundo, a Don Tulito le pilla un ataque de pánico, o desprecio, de muchísimo cuidado y va raudo a esconderse al rincón más profundo.
"Bebé", que pasa de Tulito y de Ninja como del puré de patatas -no así de Balbwin y Mey, que son sus gatos compañeros- no entiende esos números "tuliteros", ya que ni una sola vez se ha acercado a olerle ni un pelo.
Pero es que Tulito es mucho Tulito y como la "family" se ha tomado SU CASA como el "hostal perruno gaturril" empieza a estar hasta sus narices felinas de tanto visitante incordio y muestra su descontento privándoles de su enigmática, dulce y solicitada presencia.
Pero es que Tulito es mucho Tulito y como la "family" se ha tomado SU CASA como el "hostal perruno gaturril" empieza a estar hasta sus narices felinas de tanto visitante incordio y muestra su descontento privándoles de su enigmática, dulce y solicitada presencia.
¡Bien hecho Tulito! Pepe y yo estamos contigo.
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