Igual que Mey se pasa el día yendo a la puerta del piso con su "me voy" porque quiere salir al jardín y la pobre no sabe que en el "Hotel Tulito" no hay jardín, su compañero Baldwin es el rey del mambo y está más contento que unas Pascuas.
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Se come su comida, de la Tulito, la de Mey, la del vecino si es preciso y duerme en la cama -dentro, por supuesto- de Doña Tuli o en cualquier otra que pille. Eso si, hasta que oye que van a la cocina, entonces acude raudo y veloz para ayudar a la limpieza de platos. ¡Agradecido que es el bichejo!...
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