Está claro que transportar un gato no es una tarea fácil. En el "transportin" se ponen histéricos ya que lo asocian a la fatídica visita al malvado veterinario y como hay pocos gatos a los que les guste salir de casa, salvo para subirse al tejado o invadir la terraza del vecino...
La del bolsillo porta gatos me parece una brillante idea, lo malo es meterlo..., lo de la mochila, para los fríos noruegos me parece más que lógico, cómodo, calentito y aceptable por nuestro compañero.
Don Gato bajaba conmigo hasta el portal de casa hasta que un día coincidió con las luces de un coche que entraba en el parking y no volvió a salir. Pepe cuando abro la puerta del piso, va raudo y veloz a meterse bajo la cama y como ni siquiera ha ido en un "trasportin"...
Ay, el día que tenga que hacerlo... ¡Ojala ese día no llegue nunca! Menuda batalla y menudo dramón.
Ay, el día que tenga que hacerlo... ¡Ojala ese día no llegue nunca! Menuda batalla y menudo dramón.
1 comentario:
Me encanta la foto del gato que miente en facebook. Jajajaja. ¡MUY BUENO!
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